Producción pecuaria intensiva

La producción pecuaria intensiva es aquella crianza de animales con fines comerciales en pequeñas extensiones de terreno en las cuales la carga animal por unidad de área es alta.

Se incrementa la producción en el menor lapso de tiempo posible y utilizando el mínimo de espacio requerido. La producción pecuaria intensiva requiere de altas inversiones en infraestructura, construcciones, mano de obra, tecnología y alimento. La producción pecuaria intensiva se rige por las leyes de la producción industrial.

Las ventajas de este sistema son la alta producción por unidad de tiempo y por animal, la estandarización de procesos y productos y la flexibilidad ante demanda del mercado.

Las desventajas son el alto consumo de energía y la generación de desechos provenientes del estiércol de los animales que son altamente contaminantes y de difícil manejo en estas explotaciones. Sin embargo, la demanda de alimentos en el mundo entero y la disminución de áreas productivas hacen necesario este tipo de explotación.

Ante esta situación, se debe plantear la producción pecuaria intensiva con prácticas de manejo sostenibles ambientalmente. Aunque presenta altas dificultades, no es imposible y se están realizando grandes esfuerzos para promocionar e implementar las prácticas sostenibles.

Por otra parte, la producción pecuaria intensiva desde el punto de vista agroempresarial es una producción mucho más eficiente y rentable que la extensiva, aunque como ya dijimos, requiera de mayores inversiones.

Desde el punto de vista ambiental, se requieren no solo manejos que mitiguen los efectos adversos sino también todo lo relacionado con el bienestar animal, que comprende un conjunto de prácticas que aseguran que no hay maltrato y que existen condiciones apropiadas para los animales.

Son ejemplos: avicultura, piscicultura, porcicultura, ganado de leche estabulado, etc.

Esperamos que la producción pecuaria intensiva haya sido de su interés. Recuerde enviarnos sus comentarios y sugerencias.