Aunque tradicionalmente se define la ganadería como de carne o leche, hay una explotación pecuaria que contempla los dos renglones y que es llamada ganadería de doble propósito. Consiste en la crianza de animales para producción de carne y leche simultáneamente.
La producción de solo carne o solo leche está a cargo de razas especializadas. La producción doble propósito se basa en el uso de vacas cebú o criollas cruzadas con razas lecheras europeas. El doble propósito ha estado relacionado con ganadería tradicional.
En Colombia este sistema se concibe como una alternativa, sobre todo para pequeños y medianos productores con el objeto de lograr eficiencia en la producción, reducir costos y lograr subsistir.
Una de las características de este sistema es que es flexible a los requerimientos del mercado en carne y/o leche, lo que lo hace conveniente. El cruce entre razas productoras de carne con razas productoras de leche busca que la vaca sea proveedora de ambos productos: de leche a través del ordeño y de carne a través de la producción de terneros con cualidades cárnicas.
Sin embargo este modelo presenta algunos inconvenientes como es el del manejo de razas en el hato. Puede ocurrir que el uso de razas lecheras que mejora la producción de leche pero bajan la capacidad de adaptación o el uso de razas cebuínas que mejoran la producción de carne demeritando la de leche.
El manejo tradicional que se ha dado a esta opción de producción ha sido tradicional con consecuencias como la baja capacidad productiva y escasa infraestructura. Desde hace unos pocos años se ha venido incentivando el fortalecimiento de esta alternativa para hacerla más tecnológica y así poderla hacer más competitiva en la industria.
El primordial paso es el del mejoramiento genético de los hatos con destino a doble propósito y el avance en el manejo tecnológico de los mismos.