El control biológico de enfermedades consiste en detener o retardar el desarrollo de infecciones en las plantas causadas por hongos, bacterias y virus principalmente. Se logra naturalmente al propiciar la introducción y crecimiento de organismos antagonistas de la enfermedad.
Al utilizar organismos vivos en las aplicaciones se deben tener en cuenta las consideraciones para su sobrevivencia: humedad, temperatura, luz, no mezclar con agroquímicos que puedan matar al organismo beneficioso, la genética de plantas y organismos, prácticas de cultivo como la rotación, suelo, etc.
El control biológico es menos drástico y más lento que el control químico debido precisamente a que el organismo introducido debe acomodarse, actuar y propagarse de manera natural en su nuevo medio.
Presenta la gran ventaja de su poco o ningún efecto colateral hacia otras especies e incluso el hombre. No quiere decir que los controles biológicos sean totalmente inocuos ya que en algunos casos podrían producir alergias aunque son casos raros. No hay problemas de intoxicaciones.
La implementación adecuada de un control biológico en un cultivo, se puede proyectar a largo plazo con la instalación permanente del antagonista en condiciones de equilibrio. Hay dos formas de propiciar los antagonistas: introduciéndolos de manera artificial en el cultivo, trayéndolos de otro sitio o incrementando las poblaciones naturalmente existentes.
También recibe el nombre de control biológico otras estrategias como la alelopatía, las aplicaciones de extractos naturales de plantas y el uso de cultivos trampa.
La alelopatía consiste en la disposición del cultivo en campo teniendo en cuenta las reacciones bioquímicas de diferentes especies de plantas entre sí. Hay plantas que se repelen y otras que se atraen debido a la secreción de las llamadas fitohormonas.
Las aplicaciones de extractos consisten en el uso de sustancias de origen vegetal a manera de las aplicaciones de agroquímicos.
Los cultivos trampa son especies vegetales que se siembran al lado del cultivo principal para atraer plagas y enfermedades y que no afecten la producción principal.