Los setos o cercas de arbustos son elementos muy comunes en el paisaje de granjas, fincas y casas campestres; estos, además de delimitar su propiedad y darle privacidad, le añaden belleza al paisaje haciéndolo visualmente atractivo.
Y no es lo mismo una cadena de setos con ramas sueltas y desiguales que uno bien podado con el tamaño y la forma deseada según su requerimiento. Algunas herramientas de jardinería podrían ayudarle a hacer esta tarea, sin embargo, la herramienta idónea para mantener sus setos uniformes y en perfecto estado es el cortasetos.
Escoger el cortasetos adecuado es una decisión importante; adquirir aquel que se ajuste a su necesidad dependiendo del tipo de tareas a realizar con él, con certeza le ahorrará tiempo, energía y dinero.
El tipo de setos, las especies de arbustos que lo componen, la altura y el grosor de estos, son aspectos para tener en cuenta a la hora de incluir el cortasetos en su equipo de jardinería.
A partir de lo anterior usted podrá elegir el cortasetos según su peso, su fuente de alimentación, los accesorios con los que cuenta y lo más importante, el tipo y tamaño de la cuchilla.
La mayoría de las cuchillas van desde 6 pulgadas (15,4 cms) hasta 28 pulgadas (71,12 cms). Las cuchillas más pequeñas se utilizan generalmente para trabajos de precisión y retoques en la forma de los setos, las de mayor tamaño se utilizan principalmente para trabajar setos densos y de ramas gruesas.
Para realizar un trabajo promedio, una cuchilla de 18 pulgadas le dará muy buen rendimiento.
Para obtener mejores resultados, se recomienda utilizar cuchillas de doble acción, es decir, dos cuchillas trabajando en direcciones opuestas que podan las ramas y hojas en forma de tijera realizando cortes más limpios y rectos.
