La empresa colombiana Durespo S.A ha sido líder en la comercialización de motosierras, guadañadoras y fumigadoras por casi 40 años.
Durespo introdujo estos equipos en el mercado colombiano revolucionando y facilitando el trabajo de la industria forestal y agrícola. A sus años de arduo trabajo, se unen el personal calificado y un excelente servicio al cliente, lo que los ha llevado a consolidarse como una de las empresas mas importantes del país.
En el año 1976 Durespo importó las primeras cuatro motosierras a la ciudad de Medellín, donde uno de sus primeros clientes fue un ingeniero forestal que iniciaba un proyecto de reforestación en los predios del Seminario Menor de la ciudad. Desde esa primera venta, la empresa se comprometió no solo con la comercialización de equipos de altísima calidad, sino con prestar un excelente servicio al cliente: garantías extendidas, taller especializado y servicio postventa. Esta política ha perdurado por los años y es reconocida por sus clientes y distribuidores como uno de los pilares de la compañía.
La feria Internacional de Bogotá en 1976, fue la plataforma de lanzamiento al éxito para Durespo S.A., pues a partir de ese momento el país conoció el portafolio de novedosos equipos y maquinaria importados por la compañía. Allí se hicieron contactos importantes y las primeras grandes ventas a nivel nacional. Aunque la motosierra era el equipo estrella y el más vendido en el stand de Durespo, los asistentes se asombraron con una nueva fumigadora de bajo peso y alto rendimiento. A pesar de tener únicamente dos equipos que fueron importados como muestras, las ventas alcanzaron cifras inesperadas y aunque las máquinas no se encontraban en el país, los clientes esperaron gustosamente para tenerlas en su haber, abriendo así un nuevo nicho para la joven empresa.
Durespo S.A seguía consolidándose en ciudades como Medellín y Bogotá, sin embargo su ambición era llevar esta nueva tecnología hasta los lugares más recónditos del país. Uno de los primeros sitios visitados fue San Vicente del Caguán, donde el objetivo era establecer una distribución de sus productos. Después de transitar medio país por carreteras casi inaccesibles finalmente llegaron a este municipio en el departamento de Caquetá.
Con el fin de conseguir la mayor audiencia posible para la demostración de estos equipos que nunca antes habían sido vistos en aquella población, los dueños de la empresa eligieron como medio de comunicación un megáfono que logró cautivar a todo el pueblo. Las motosierras y guadañadoras permitieron realizar ágil y rápidamente el trabajo que antes podía tomar horas o días. Esta exhibición de Durespo cambió para siempre la forma de trabajar de los habitantes, optimizándoles el tiempo de trabajo y trayéndoles beneficios económicos.
En el municipio de Chigorodó, en el Urabá antioqueño, Durespo continuó la conquista de nuevos territorios convenciendo uno a uno a quienes todavía utilizaban el hacha ancestral o las sierras manuales. En un camino en construcción encontraron que un árbol enorme obstruía la trayectoria de un puente de gran importancia para la población, este fue el pretexto perfecto para demostrar la efectividad de la motosierra y el árbol fue cortado rápidamente y con seguridad. Este hecho permitió que los habitantes entendieran las bondades de las máquinas y se abrieran a cambiar sus equipos de trabajo por unos más especiales e idóneos.
De esta forma y con cientos de anécdotas significativas, Durespo llegó a tener presencia a lo largo y ancho del territorio nacional, afianzándose como pionero en la importación y comercialización de maquinaria de última tecnología y alta calidad para una industria en crecimiento con requerimientos especiales y reafirmando su excelente servicio al cliente.
Con su amplia trayectoria y respaldo al sector agroindustrial, Durespo S.A. cuenta con el potencial para afrontar los retos del mercado y establecer nuevos nichos en un horizonte cercano.
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